El reciente e histórico aumento de viajes ciclistas en la CDMX, ha demostrado la utilidad y necesidad de la infraestructura ciclista, sobre todo, de las ciclopistas, por lo que, esta vez, hablaremos de los diversos beneficios de la ciclovía.
Sin embargo, no nos enfocaremos tanto en las ventajas que un carril ciclista trae a la comunidad en general, sino propiamente a ti como usuario de una. Esto, debido a que uno de los principales motivos por los que mucha gente no usa la bici, es por no tener espacios seguros por donde circular.
La intención de este escrito es, precisamente, demostrarte lo seguras que son las ciclopistas. ¡Acompáñanos!
Beneficios de la ciclovía, ¿en qué me sirve?
Andar por una ciclopista no es simplemente circular dentro de ella, sino aprovechar los diversos beneficios y ventajas que te trae usar la bici en vez del automóvil. De esta manera, podemos mencionar algunos de ellos:
Pedalea seguro
Nuestro primer punto es el más importante. De los principales beneficios de la ciclovía, es que puedes circular dentro de ella sin el miedo de que un automóvil te atropelle. Esto, gracias a que cuenta con barreras físicas, como confibicis, que impiden la invasión del carril por parte de los carros.
Estos dispositivos viales crean una separación física entre los usuarios de bicis y los automovilistas. De esta manera, puedes circular mucho más seguro hacia tu destino.
Llega más rápido
El segundo beneficio está directamente relacionado con el primero. Gracias a que los vehículos motorizados tienen prohibido el paso en las ciclovías, no tendrás que enfrentarte a la tediosa y peligrosa labor de esquivarlos ni, mucho menos, atascarte en el tráfico que provocan.
Así, al no tener ni un carro que te estorbe, puedes pedalear sin parar, deteniéndote únicamente en los semáforos para cruzar correctamente. En trayectos de pocos kilómetros, es más rápida y segura que ir en un carro.
Además, bajo ciertas especificaciones, es válido cruzar el semáforo en rojo cuando vas en bici. Pero ojo, no abuses de este derecho y ten cuidado al pasar.
Disfrutas de la ciudad
Cuando viajas en auto particular o en transporte público, te pierdes de conocer la ciudad, nuevas rutas y lugares diferentes. La ciclopista, además de llevarte por un camino alternativo, suele estar cerca de sitios de interés.
Si encuentras un sitio que llame tu atención, al ir en bicicleta te es más fácil detenerte enseguida, encadenarla en casi cualquier lado y entrar al lugar. Cuando vas en carro, primero tienes que encontrar un cajón de estacionamiento y, probablemente, este te quede a varias cuadras del local, plaza, negocio, parque o cualquiera sea el espacio que querías visitar.
Forma parte de la naturaleza
En algunas ocasiones, el carril ciclista suele pasar en medio de espacios naturales. Desde parques hasta camellones o, incluso, bosques como el de Chapultepec. Si lo que deseas es un paseo en bici diferente, puedes probar en estos lugares. Una excelente opción es el parque Bicentenario.
Por otro lado, estos carriles suelen ser bicisiendas y no ciclovías. Es importante que conozcas la diferencia entre ambas.
Ahorra unos pesos
Otros de los beneficios de la ciclovía, además de fomentar la salud con el uso de la bicicleta, es ayudarte en el aspecto económico.
El usar la ciclovía te permite llegar del punto a al b pedaleando, sin la necesidad de gastar en el transporte público. En todo caso, de ser necesario, muchas veces un carril ciclista te acercará o te conectará directamente con otro medio de transporte público que necesites usar.
Estos son algunos de los beneficios de la ciclovía fuera de lo deportivo y psicológico. Si deseas saber más sobre estos últimos aspectos, te invitamos a darte una vuelta por las rodadas que tenemos hablando sobre estos temas y otros más.
